Las condiciones de vida cada vez son más precarias debido a la mundialización del Capitalismo. La seguridad se ha transformado en control a través de la tecnología. La sociedad del riesgo obedece a unas planes de desactivación y posterior sumisión que ponen en cuarentena a la sociedad. El aislamiento es la clave para dividir y fomentar la competitividad; eufemismo de odio y violencia.
La sociedad de la escasez aumentará el poder de la élite dirigente sobre sus súbditos que una vez sometidos y totalmente dependientes del Sistema sólo podrán recurrir a sus gobernantes para que puedan sobrevivir de una forma cada vez más enajenada e inhumana.