In LSD Veritas -

Benvinguts al meu racó.


Todo está sujeto a interpretaciones, por lo tanto la realidad es subjetiva y las formas de pensar y vivir son caóticas y conflictivas. El pensamiento enmascara a menudo la verdad de los hechos. La realidad ya no puede ser objetiva. Todo pasa por el filtro del pensamiento y el individuo deja de observar los hechos tal como son.

martes, 6 de octubre de 2015

Reflexión sobre la revolución.




La revolución nunca es un ideal, es por lo contrario llevar a la práctica unas convicciones que van más allá de las ideas.

Las ideas son un producto de la imaginación, son por decirlo de alguna manera abstracciones y pensamientos, nunca hechos en sí, las ideas dejan de serlo cuando se convierten en acciones

5 comentarios:

Loam dijo...

"...la Realidad no es todo lo que hay, que siempre hay más allá, y eso es lo que secunda cualquier forma de rebelión. Entonces está claro que la manera, el instrumento, el arma para la rebelión es justamente ir contra esas ideas y actitudes positivas que el Régimen nos impone. De modo que no puede pensarse en nada antes de pensar esa posibilidad de decir NO que es hacer NO. Es “hacer no” porque consiste justamente en un hacer que es un decir. Por ejemplo, los discursos de los Ministros del Poder o las cuentas de la Banca de tal o cual sitio pueden tomarse aparentemente como un decir (son palabras, son números), pero al mismo tiempo son un hacer. Así que cualquier sueño de revolución tiene que partir igualmente de que el primer hacer es el decir: el decir NO. El decir NO a lo que está dicho y se nos manda; [...] y ese decir es un hacer". Agustín García Calvo

http://arrezafe.blogspot.com.es/2015/05/decir-no-lo-que-se-nos-manda-agustin.html

Salut

Piedra dijo...

La revolución siempre significa violencia, pues aun solo tratándose de ideas, estas serán perseguidas y aun más que las acciones. La violencia del sistema que rechaza cualquier cambio que se le oponga o lo combata. Cuantos inocentes (por sus acciones) han sido asesinados simplemente por tener ideas y que estás pudieran ser contrarias al sistema. A día de hoy, aun son miles los presos políticos en este país a los que sol ose les imputan cargos (reales) de pensamiento o de ideología.

Salud!

Albert dijo...

Un acto revolucionario no implica necesariamente violencia, con desobedecer una orden basta, otra cosa es que la desobediencia pueda desencadenar violencia, pero de todos modos es algo a lo que siempre estaremos expuestos desobedezcamos o no al vivir en un sistema de dominación. Puede haber grados de violencia, como hay varios de libertad también, en eso sí que estoy de acuerdo, pero en el fondo no podremos zafarnos por completo de la violencia porque es algo intrínseco al hombre y al sistema, eso no significa que podamos anular la violencia, dependerá de cada uno de nosotros el llevarlo a cabo o no, es simplemente una opción personal.


Salut!

Piedra dijo...

Claro, un acto revolucionario, entiendo que te refieres a cualquier cosa que contradiga la norma establecida, puede ser no-violento, pero en el momento que el estado piense que ese acto por inocente que sea puede representar un peligro para él, será el propio estado quien use la violencia para anularlo.
La violencia no es del que lucha contra el estado, la violencia es de quien tiene la fuerza, del estado. Es lo que quería decir.

Salud!

Albert dijo...

Intuí lo que querías decir, sólo quería aclarar la cuestión en la medida de mis posibilidades.

Salut!