In LSD Veritas -

Benvinguts al meu racó.


Todo está sujeto a interpretaciones, por lo tanto la realidad es subjetiva y las formas de pensar y vivir son caóticas y conflictivas. El pensamiento enmascara a menudo la verdad de los hechos. La realidad ya no puede ser objetiva. Todo pasa por el filtro del pensamiento y el individuo deja de observar los hechos tal como son.

viernes, 11 de mayo de 2012

Medios de comunicación y violencia.


Los medios de comunicación, la televisión y el cine explotan la violencia como recurso para vender sus productos, y también sirve en muchas ocasiones para modificar la opinión publica. Pero en el fondo de la cuestión surge un dilema.

¿En que punto es necesaria la violencia y legítima cómo defensa en situaciones de tortura tiranía y explotación para preservar la vida?

¿Se podría también utilizar la violencia como arma para combatir injusticias en general?

Ya que en la actualidad se dan en muy raras ocasiones estas dos situaciones, (o sólo cuando se producen de forma "esporádicas" o previamente concertadas) habría que analizar que papel juega la violencia en las relaciones de todo tipo tanto humanas, sentimentales, comerciales, laborales, etc.

La violecia psicológica en la actualidad sirve para medir el grado de vulnerabilidad de los individuos y las sociedades, y regula la economía global para mantener el equilbrio en el sistema, de manera que, los ajustes que hayan que implementar los políticos sirvan para moldear también el pensamiento del individuo o de las sociedades como forma de condicionamient o para la supervivencia.


Todo se reduce a equilibrar el sistema según el tipo de sociedades que estén a merced de cambios para obtener de ellas el máximo rendimiento económico sin que se provoque en ellas unas confrontaciones y conflictos que deriven en altercados y violencia o disturbios en las grandes ciudades que puedan poner en peligro el "orden público", y que pudieran servir para alarmar a la población en general de una situación insostenible en la que las fuerzas de seguridad del Estado no pudieran controlar diferentes disturbios y estallidos sociales a gran escala, que daría pie a posibles cambios de gobierno.


 Lo que trato de explicar es que de una manera u otra, todo está en mayor o menor medida planificado , y que las sociedades gobernadas son reguladas por una serie de leyes y normas de las que los individuos que formamos parte del gran sistema somos también dependientes en mayor o menor grado debido a nuestra dependencia psicológica en la inmensa mayoría de los casos.

13 comentarios:

Anónimo dijo...

Hay una violencia planificada, sí, como también hay una planificación, o control, del descontento (véase aquí el 15-M, lleno de bienintencionados pero, a la luz de los hechos, ineficaz y causa de una mayor abstención y dispersión del voto, saliendo así favorecida el ala más dura del sistema).

Dicho esto, en mi opinión la violencia no debe reducirse a condicionantes éticos, al menos no en todos los casos. Cuando a un animal sano lo humillan, agreden, etc., lo normal es que se defienda. Si una sociedad es víctima del robo a gran escala, la estafa, el constante pisoteo de derechos, y no reacciona (o lo hace apenas "manifestándose"), entonces esa sociedad no está sana, está enferma.

En defensa propia, la violencia es (considerada según un punto de vista moral) LEGÍTIMA. Y además eficiente. Por esta razón es permanentemente demonizada desde los medios, los mismos medios que aprueban las acciones EXTREMADAMENTE VIOLENTAS de los gobiernos, de los estados, cuando bombardean (Yugoslavia, Iraq, Libia...) o apalean a los huelguistas tras dejar a millones de personas a dos velas o en la puta calle.

No conozco un solo caso en la historia de la Humanidad en que los déspotas hayan soltado el cetro, la vara de mando, por las buenas. O que se hayan atenido a razones. Sólo cuando los poderosos, los mandamases, los explotadores, se sienten amenazados, ceden. Sólo entonces. Por eso quieren desterrar la "violencia" de la moral colectiva. Ellos, que no gobiernan sino mediante la violencia.

Saludos

Anónimo dijo...

¿Qué habría de hacerse si España finalmente es "rescatada", dado lo que ello conlleva para gran parte de los ciudadanos (diez o quince o veinte años perdidos, frustración generacional, fracaso total... para millones de personas)? ¿Quedarse de brazos cruzados? ¿Apelar al sentido común de quien tiene el culo a buen recaudo? ¿Suplicar piedad? ¿Recurrir a las buenas razones cuando los que hoy tienen veinte no trabajarán, ni siquiera en malas condiciones, hasta los treinta y cinco, y los que hoy tienen treinta, jamás? ¿Hablar de la purificación del sacrificio cuando los que hoy tienen cuarenta y cinco o cincuenta no volverían a tener ingresos ya nunca más, quedando relegados, condenados a la pobreza, a la reclusión, o a peores contextos todavía? ¿Cruzarse de brazos cuando los máximos responsables del siniestro total no sólo quedan impunes sino que incrementan ganancias? Ni siquiera Gandhi llamaba a semejante sumisión. Gandhi llamaba a la resistencia pasiva y al boicot, no a la sumisión. Y mucho me temo que ciertas corrientes "pacifistas" le hacen un gran favor al sistema. Yo como anarquista no estoy por la paz social, no en condiciones de humillación, degradación, expolio, estafa y violencia institucional. En eso me quedo con los judíos antes que con la venenosa filosofía cristiana: ojo por ojo y diente por diente. No pueden salir gratis ciertos delitos, ciertos crímenes. Y la forma de cobrarse la factura ha sido, es y será siempre la violencia en legítima defensa.

Saludos

El lobo estepario

Albert dijo...

Pero si el "orden" y la paz según la propaganda consiste en la "no-violencia" o la sumisión, y éste mismo orden de las cosas cuenta con el consenso y apoyo de una parte mayoritaría de la sociedad, se hace muy dificil combatir las injusticias del sistema con violencia aunque fuera en el último de los casos en legítima defensa de los derechos humanos.

De todos modos, si creo que hay que buscar otros caminos para combatir y luchar contra las injusticias que se dan el mundo.

Albert dijo...

En el comentario anterior me refería a España por ejemplo, no creo que en el contexto que nos encontramos a día de hoy aún se puedan dar situaciones dónde una mayoría-(CONSENSO) pueda influir en decesiones tanto políticas, económicas y sociales de mayor o menor importancia para el desarrollo de la sociedad en general. Así lo veo yo.

Anónimo dijo...

Vamos a ver: las ovejas son fácilmente sacrificables porque no oponen resistencia. Los lobos, por ejemplo, no. Si opones resistencia, has ganado media batalla. Esto es una realidad objetiva. Si opones resistencia, tal vez ni siquiera haya batalla, ya que el agresor se echa atrás. Y si finalmente la hay, tienes al menos la posibilidad de ganar, cosa imposible si te quedas de brazos cruzados. Esto es así sí o sí.

Saludos.

El lobo estepario

Albert dijo...

Sí, pero esto es así en el reino animal o cuando interactuan hombre o animal, pero si lo trasladas a las relaciones o confrontaciones hombre-hombre no sigue siempre este patrón porque interfiere entre otras cosas el pensamiento, con lo cual no parece tan claro.

Albert dijo...

"Si una sociedad es víctima del robo a gran escala, la estafa, el constante pisoteo de derechos, y no reacciona (o lo hace apenas "manifestándose"), entonces esa sociedad no está sana, está enferma"

Es cierto, en el fondo de la cuestión la sociedad en general nunca ha estado sana realmente.

Anónimo dijo...

¿El pensamiento? ¿Y? ¿O es que el pensamiento es únicamente un dique de contención?

Si España es "rescatada", personalmente tengo muy claro que mi pensamiento me dirá: a la calle.

Un "rescate" para España significa la ruina. Pobreza generalizada. Falta de perspectivas de futuro a largo plazo (veinte años). Emigrar (los que puedan). Fin de los espacios públicos (ya paulatinamente saqueados). Fin de mínimos derechos. En fin, vivir de puta pena, por hablar claro.

Y no porque haya llegado una plaga de langostas, un huracán que se llevó la cosecha..., no. Mientras una gran parte de la población vuelva a niveles de vida propios del capitalismo salvaje pre-II G. M., tanto los causantes del desaguidado como sus cómplices y/o beneficiarios, seguirán manteniendo sus mismos privilegios, repartiéndose prebendas y, en definitiva, viviendo a cuerpo de rey.

En semejante situación, es moralmente repugnante quedarse de brazos cruzados.

Saludos

El lobo estepario

Anónimo dijo...

Fíjate que los peperos están ya cagados. De Guindos, el que hundió la filial de Leman Brothers en la Península Ibérica, echa la culpa a Grecia, a la desesperada, pidiendo su expulsión del euro.

Estos listillos, que no paraban de cacarear, han dejado el país al borde del precicipio en unos meses. Y siguen escudándose en la herencia recibida, cuando están en la mayoría de las CCAA y la deuda es mayoritariamente autonómica.

Yo no voy a ser ahora dudoso de defender o de exculpar a la falsa izquierda del PSOE, pero los peperos son de sainete. No hay mayores fantasmas, mayores bocazas, mayores inútiles, que estos tipos.

Pero nada, se cosecha lo que se siembra.

Anónimo dijo...

Una pregunta. Según tú, ¿estaba planificada la acción directa de los anarquistas entre mediados del XIX y principios del XX? No, ¿verdad que no? Y tampoco el sindicalismo "anarquista" estuvo nunca sujeto a las directrices del poder.

Estoy más o menos de acuerdo con que, desde hace un siglo, se da un control exhaustivo de los movimientos sociales, pero no todo está sujeto a ese control. A veces las consecuencias se vuelven impredecibles. Por ejemplo, en esta "crisis" (que debería denominarse "colapso") no ha influido únicamente la necesidad de "achinar" a los trabajadores europeos, dada la estabilización del último estadio capitalista: el global. Como digo, no es sólo por amasar mayores plusvalías (e invertirlas en el casino financiero) por lo que se exprime ya a los trabajadores en Occidente como no se les había exprimido en décadas (deteriorando, además, todas las condiciones, con tal de hacer pasar por bueno hasta el más mísero de los salarios). Ha influido también un factor ideológico, el fundamentalismo "neocon", la línea económica dictada por Ángela Merkel (o por aquellos a los que sirve). En este sentido, existe un condicionante imprevisto, es decir, no previsto, no planificado, que es la ideología. Se conjugan en todo lo que está pasando el interés y el fanatismo. Y digo que este último factor no estaba previsto por la sencilla razón de que puede llevar a una desembocadura no deseada: el caos social. Que después el caos resulte oportuno para imponer gobiernos dictatoriales y aplastar todavía más a los pueblos, es otra historia. Pero en el remolino son muchas las fortunas que se pierden, muchas las ganancias que no se alcanzan. Si el sistema ya exprime lo suficiente al trabajador (desde el obrero al médico a sueldo del Estado), ¿por qué poner en riesgo su funcionamiento? No, no es sólo planificación. Se asocian la planificación en aras del gran capital y los graves errores de quienes toman decisiones (velando por ese gran capital). Y por esto mismo no toda acción contra el sistema está sometida a control: todavía no inventaron la forma de dirigir las mentes por control remoto. No es todo tan irreversible como a veces se pinta.

El lobo estepario

Albert dijo...

El principal problema que veo de la crisis, es que el capital está en manos de unos pocos, y si el hombre por su parte reduce su existencia a la simple supervivencia, está claro que limita mucho su visión de lo que pasa en el mundo y de este modo el cambio deseado se hace muy dificil.

Creo que es más un problema a nivel psicológico que de supervivencia fisica, como se pretende hacer creer a los ciudadanos, por lo que no se ve claramente una alternativa que pueda cambiar todo el sistema.

Albert dijo...

Imponen un modelo materialista-existencialista basado en la simple supervivencia, más que nada para condicionarnos, entre otras cosas.

Albert dijo...

O limitar la visión de la realidad como medio para hacer creer al hombre que lo que pasa en el exterior es la única verdad que existe, y por contra disminuir o eliminar la vida interna "espiritual" del individuo, la realidad que puede crear el hombre a partir de su ser.