El brazalete o pulsera electrónico es como si fueras un preso que esta bajo vigilancia, me parece un poco arriesgado, pero vete a saber, si la gente ha llevado la dichosa mascarilla hasta hace poco, no me extrañaría nada que tragase con esto también.
Ayer supe de 1) un vecino que casi la palma en junio por neumonía (triplemente inoculado); 2) una conocida (veterinaria) a la que han diagonosticado microtrombos por todo el cuerpo (triplemente inoculada), 3) la hija de una señora (veraneante aquí) que está ahora mismo con neumonía (en pleno julio), no sé si doble o triplemente inoculada, 4) una profesora que se puso a sangrar por la nariz en plena clase (hará un mes), habiendo sufrido desde entonces otros dos sangrados y, la semana pasada, un derrame en un ojo (triplemente inoculada y sin problemas de salud previos, de hecho, he ido con ella y su marido decenas de veces de ruta por el bosque y los acantilados, a paso ligero). De estas cuatro personas, sólo la chica (la número 3) se hace preguntas.
Se cumple el dicho aquel que reza; "no hay peor ciego que el que no quiere ver". Pero al final esto caerá por su propio peso y muchos tendrán que abrir los ojos ante la evidencia, por muy dolorosa que sea ésta, pero el problema es que ya será demasiado tarde para bastantes inoculados.
Pasado un año, apenas hubo en España un incremento "no explicable" de 25.000 muertes (no atribuidas al covid, los que mueren hoy oficialmente por covid son otro cantar), estando, no obstante, claro el factor diferencial (hay que estar muy despistado a estas alturas para atribuírselas al extrés). Sin embargo, también es cierto que no se ha dado la hecatombe que anunciaban algunos, con cuyo discurso parecen, a veces, tontos útiles del sistema. No desde luego en términos de mortandad: otra historia es la aceptación general del certificado covid y demás atropellos, una sumisión que ha marcado un punto de inflexión en esta sociedad zombificada. He ahí el verdadero "apocalipsis".
Así y todo, una cosa son las muertes (presumiblemente por X, y mayoritariamente con triple banderilla) y otra las enfermedades y el riesgo de padecer constantemente "cuadros covid" (inflamación pulmonar, neumonía, trombosis, infarto, etc.) como consecuencia de tener circulando por el organismo ese ARNm no tan fácilmente degradable (en contra de lo que se decía), y no digamos ya si se acabara concluyendo que se sintetiza con el ADN, lo que significaría que los inoculados generarían la famosa "espiga" indefinidamente de manera periódica.
En mi caso, son ya varias decenas de personas (a las que conozco o conocía personalmente) con repentinos problemas de salud en el último año o año y medio, todas inoculadas, incluyendo tres muertes (más el que la espichó justo enfrente en otoño), así que no hay casualidad que valga: se corresponde, además, con los incrementos y efectos adversos reconocidos en la propia prensa sistémica.
Los inoculados han comprometido su sistema inmunitario y lo han hecho simplemente porque se lo decían en televisión. Pero bueno, existen algunas pruebas que miden los riesgos, y también los anticoagulantes y la vitamina D, que regenera los tejidos.
Éste (la fascistización de la sociedad) es el problema: https://twitter.com/plaforscience/status/1547303740427976705?ref_src=twsrc%5Egoogle%7Ctwcamp%5Eserp%7Ctwgr%5Etweet
Todo se hace con el beneplácito de las masas/mayorías, y, a diferencia de las democracias (definidas, sobre el papel, por mayorías electorales, participación ciudadana en la vida pública, separación de poderes y libertades individuales y colectivas garantizadas), en los neofascismos la sociedad se divide en buenos (los que pasan por el aro y hacen caso a sus benevolentes gobernantes) y malos (los que "se creen mejores que los demás" y desobedecen los dictados y pautas de políticos, periodistas en nómina, filantrocapitalistas y, ahora, farmacéuticas).
Va todavía para largo porque la mitad tiene vocación de oveja.
Pero todo lo que ha pasado a partir de la "pandemia" habrá que analizarlo mejor. Por ejemplo, la mayoría de los anarquistas o libertarios han tragado con todas las medidas impuestas; encierros, bozales, pinchazos, etc, hasta hacían merchandising con las mascarillas, cosa inexplicable dentro del mundo libertario donde en teoría se respeta la libertad individual y se tachaba a los que primero dudábamos y después nos oponíamos de negacionistas y conspiraconicos o cosas peores. Esto sin duda no hay por donde cogerlo y confirmó mis sospechas de que la mayoría de los sindicatos estaban infiltrados, por otro lado algunos sectores de la extrema derecha fue la primera que alzó la voz contra las medidas covidianas. Realmente algo increíble...
La sociedad teledirigida por la colectividad a través de los medios de comunicación de masas.
“Como la termitera, la nueva aglomeración tiene tendencia a elevar concreciones de cemento con innumerables alveolos climatizados, mientras su red de conductos va enterrada por el suelo. Pero, sobre todo, la masa humana y mecánica cada vez más densa que pulula por sus grietas se vuelve cada día más uniforme, menos autónoma, más estrictamente teledirigida por la colectividad; su supervivencia así lo exige. Como en la termitera, esta masa uniforme se divide de manera creciente en géneros que se ignoran y que distinguen los gestos y el lenguaje de sus funciones. Ciega y sorda, pero estrictamente informada por los signos que activa una central que no conoce, se afana en un mundo tibio y cerrado, cada vez más descomunal y estrecho, sin sentir de esta presión creciente más que un vago malestar. A no ser que una catástrofe reviente un buen día la termitera, trayendo demasiado tarde, con el alba, la muerte” Bernard Charbonneau
"Por ejemplo, la mayoría de los anarquistas o libertarios han tragado con todas las medidas impuestas; encierros, bozales, pinchazos, etc, hasta hacían merchandising con las mascarillas."
Como sabes, llevo un año al margen (sólo en diciembre me acerqué a la civilización), así que he intuido, más que presenciado, las olas de histeria e imbecilidad que trajo la inoculación masiva. Pero que autoproclamados libertarios o anarquistas hayan intentado hacer caja con los bozales ya es de esperpento valleinclanesco.
Lo que ocurre es que estos neofascimos están disfrazados de ciencia, lo cual explica todos los sucesos que acontecen, pandemias, cambio climático, crisis económica y demás desastres provocados o naturales, de manera que los expertos, los técnicos, etc son los nuevos gurús que dirigen a la sociedad. Estos neofascismos se implantan en clave científica para que sean aceptados por los masas, de modo que lo político ya no se percibe como lo fundamental. Es un proceso más largo pero a la vez también es más efectivo que un totalitarismo clásico.
La mayoría de anarquistas viven anclados en el pasado, aún están rememorando la Guerra Civil, sin embargo, creo que todavía no se han dado cuenta del mundo actual en el que viven.
Es la tiranía cientificista que presagió Bakunin. Se reviste de razón, la que le da "la Ciencia", como si tuviera ésta entidad propia, como si no fuera un instrumento sujeto a intereses, manejado por clanes, etc. Como si hubiera, por otra parte, una única "Ciencia", así pues, no cuestionable, no refutable, palabra divina, amén. Palabra divina incluso en contra de las evidencias, incluso sucediéndose en su nombre las contradicciones, falacias, mentiras y arbitrariedades más absurdas.
Respecto a la Guerra Civil Española, no me parece incompatible buscar en ella gran parte de los males de la España actual (que eran, por otra parte, centenarios, porque son los del tradicionalismo español) con ubicarse en el momento histórico que vivimos, con afrontar la distopía. El autoritarismo del español medio, herencia de un país cuartelero, autoritarismo consolidado con la cultura e ingeniería social del franquismo, favorece hoy, a izquierda y derecha, estos desmanes autoritarios por un supuesto patógeno de escasa letalidad (siendo además ésta una media que suben los octogenarios con sus múltiples achaques, grupo al que había que haber protegido y punto).
Gracias por todo exelente todo sus trabajos.
ResponderEliminarDe nada...
ResponderEliminarLa última, cuidado con salir de casita sin hacer los deberes. Es el futuro, me temo.
ResponderEliminarhttps://elpais.com/sociedad/2022-07-12/hong-kong-impondra-un-brazalete-electronico-para-controlar-las-cuarentenas-en-casa-de-positivos-de-coronavirus.html
El lobo estepario
El brazalete o pulsera electrónico es como si fueras un preso que esta bajo vigilancia, me parece un poco arriesgado, pero vete a saber, si la gente ha llevado la dichosa mascarilla hasta hace poco, no me extrañaría nada que tragase con esto también.
ResponderEliminarAyer supe de 1) un vecino que casi la palma en junio por neumonía (triplemente inoculado); 2) una conocida (veterinaria) a la que han diagonosticado microtrombos por todo el cuerpo (triplemente inoculada), 3) la hija de una señora (veraneante aquí) que está ahora mismo con neumonía (en pleno julio), no sé si doble o triplemente inoculada, 4) una profesora que se puso a sangrar por la nariz en plena clase (hará un mes), habiendo sufrido desde entonces otros dos sangrados y, la semana pasada, un derrame en un ojo (triplemente inoculada y sin problemas de salud previos, de hecho, he ido con ella y su marido decenas de veces de ruta por el bosque y los acantilados, a paso ligero). De estas cuatro personas, sólo la chica (la número 3) se hace preguntas.
ResponderEliminarEl lobo estepario
Se cumple el dicho aquel que reza; "no hay peor ciego que el que no quiere ver". Pero al final esto caerá por su propio peso y muchos tendrán que abrir los ojos ante la evidencia, por muy dolorosa que sea ésta, pero el problema es que ya será demasiado tarde para bastantes inoculados.
ResponderEliminarPasado un año, apenas hubo en España un incremento "no explicable" de 25.000 muertes (no atribuidas al covid, los que mueren hoy oficialmente por covid son otro cantar), estando, no obstante, claro el factor diferencial (hay que estar muy despistado a estas alturas para atribuírselas al extrés). Sin embargo, también es cierto que no se ha dado la hecatombe que anunciaban algunos, con cuyo discurso parecen, a veces, tontos útiles del sistema. No desde luego en términos de mortandad: otra historia es la aceptación general del certificado covid y demás atropellos, una sumisión que ha marcado un punto de inflexión en esta sociedad zombificada. He ahí el verdadero "apocalipsis".
ResponderEliminarAsí y todo, una cosa son las muertes (presumiblemente por X, y mayoritariamente con triple banderilla) y otra las enfermedades y el riesgo de padecer constantemente "cuadros covid" (inflamación pulmonar, neumonía, trombosis, infarto, etc.) como consecuencia de tener circulando por el organismo ese ARNm no tan fácilmente degradable (en contra de lo que se decía), y no digamos ya si se acabara concluyendo que se sintetiza con el ADN, lo que significaría que los inoculados generarían la famosa "espiga" indefinidamente de manera periódica.
En mi caso, son ya varias decenas de personas (a las que conozco o conocía personalmente) con repentinos problemas de salud en el último año o año y medio, todas inoculadas, incluyendo tres muertes (más el que la espichó justo enfrente en otoño), así que no hay casualidad que valga: se corresponde, además, con los incrementos y efectos adversos reconocidos en la propia prensa sistémica.
Los inoculados han comprometido su sistema inmunitario y lo han hecho simplemente porque se lo decían en televisión. Pero bueno, existen algunas pruebas que miden los riesgos, y también los anticoagulantes y la vitamina D, que regenera los tejidos.
El lobo estepario
Éste (la fascistización de la sociedad) es el problema: https://twitter.com/plaforscience/status/1547303740427976705?ref_src=twsrc%5Egoogle%7Ctwcamp%5Eserp%7Ctwgr%5Etweet
ResponderEliminarTodo se hace con el beneplácito de las masas/mayorías, y, a diferencia de las democracias (definidas, sobre el papel, por mayorías electorales, participación ciudadana en la vida pública, separación de poderes y libertades individuales y colectivas garantizadas), en los neofascismos la sociedad se divide en buenos (los que pasan por el aro y hacen caso a sus benevolentes gobernantes) y malos (los que "se creen mejores que los demás" y desobedecen los dictados y pautas de políticos, periodistas en nómina, filantrocapitalistas y, ahora, farmacéuticas).
Va todavía para largo porque la mitad tiene vocación de oveja.
El lobo estepario
Pero todo lo que ha pasado a partir de la "pandemia" habrá que analizarlo mejor. Por ejemplo, la mayoría de los anarquistas o libertarios han tragado con todas las medidas impuestas; encierros, bozales, pinchazos, etc, hasta hacían merchandising con las mascarillas, cosa inexplicable dentro del mundo libertario donde en teoría se respeta la libertad individual y se tachaba a los que primero dudábamos y después nos oponíamos de negacionistas y conspiraconicos o cosas peores. Esto sin duda no hay por donde cogerlo y confirmó mis sospechas de que la mayoría de los sindicatos estaban infiltrados, por otro lado algunos sectores de la extrema derecha fue la primera que alzó la voz contra las medidas covidianas. Realmente algo increíble...
ResponderEliminarLa sociedad teledirigida por la colectividad a través de los medios de comunicación de masas.
ResponderEliminar“Como la termitera, la nueva aglomeración tiene tendencia a elevar concreciones de cemento con innumerables alveolos climatizados, mientras su red de conductos va enterrada por el suelo. Pero, sobre todo, la masa humana y mecánica cada vez más densa que pulula por sus grietas se vuelve cada día más uniforme, menos autónoma, más estrictamente teledirigida por la colectividad; su supervivencia así lo exige. Como en la termitera, esta masa uniforme se divide de manera creciente en géneros que se ignoran y que distinguen los gestos y el lenguaje de sus funciones. Ciega y sorda, pero estrictamente informada por los signos que activa una central que no conoce, se afana en un mundo tibio y cerrado, cada vez más descomunal y estrecho, sin sentir de esta presión creciente más que un vago malestar. A no ser que una catástrofe reviente un buen día la termitera, trayendo demasiado tarde, con el alba, la muerte”
Bernard Charbonneau
"Por ejemplo, la mayoría de los anarquistas o libertarios han tragado con todas las medidas impuestas; encierros, bozales, pinchazos, etc, hasta hacían merchandising con las mascarillas."
ResponderEliminarComo sabes, llevo un año al margen (sólo en diciembre me acerqué a la civilización), así que he intuido, más que presenciado, las olas de histeria e imbecilidad que trajo la inoculación masiva. Pero que autoproclamados libertarios o anarquistas hayan intentado hacer caja con los bozales ya es de esperpento valleinclanesco.
El lobo estepario
Lo que ocurre es que estos neofascimos están disfrazados de ciencia, lo cual explica todos los sucesos que acontecen, pandemias, cambio climático, crisis económica y demás desastres provocados o naturales, de manera que los expertos, los técnicos, etc son los nuevos gurús que dirigen a la sociedad. Estos neofascismos se implantan en clave científica para que sean aceptados por los masas, de modo que lo político ya no se percibe como lo fundamental. Es un proceso más largo pero a la vez también es más efectivo que un totalitarismo clásico.
ResponderEliminarLa mayoría de anarquistas viven anclados en el pasado, aún están rememorando la Guerra Civil, sin embargo, creo que todavía no se han dado cuenta del mundo actual en el que viven.
ResponderEliminarEs la tiranía cientificista que presagió Bakunin. Se reviste de razón, la que le da "la Ciencia", como si tuviera ésta entidad propia, como si no fuera un instrumento sujeto a intereses, manejado por clanes, etc. Como si hubiera, por otra parte, una única "Ciencia", así pues, no cuestionable, no refutable, palabra divina, amén. Palabra divina incluso en contra de las evidencias, incluso sucediéndose en su nombre las contradicciones, falacias, mentiras y arbitrariedades más absurdas.
ResponderEliminarRespecto a la Guerra Civil Española, no me parece incompatible buscar en ella gran parte de los males de la España actual (que eran, por otra parte, centenarios, porque son los del tradicionalismo español) con ubicarse en el momento histórico que vivimos, con afrontar la distopía. El autoritarismo del español medio, herencia de un país cuartelero, autoritarismo consolidado con la cultura e ingeniería social del franquismo, favorece hoy, a izquierda y derecha, estos desmanes autoritarios por un supuesto patógeno de escasa letalidad (siendo además ésta una media que suben los octogenarios con sus múltiples achaques, grupo al que había que haber protegido y punto).
El lobo estepario