La imagen (televisión e Internet) crea un mundo ideal para cada tipo de individuo, de manera que se pueda sentir cómodo en su espacio y así poder formar parte, integrándose al Sistema de alguna forma u otra. No es un aislamiento elegido o neutro (individual) sino que está dirigido para someterlo a un encapsulamiento en su vida privada y poder controlar sus decisiones desde ahí a partir de la imagen que le han proyectado para que pudiera escoger según su pensamiento.
Si la revolución industrial supuso la adaptación del hombre al trabajo asalariado en la primera etapa del Capitalismo, la revolución tecnológica supone la adaptación del hombre a las máquinas como falseamiento de la realidad y desaparición de lo humano como modo de vida alternativo para escapar del estado de preocupación y desesperación que impone el sistema de dominación para la supervivencia.
Internet no sólo fue creado para el control y la vigilancia también para aniquilar al individuo y formar grupos de afinidad en base a corrientes de pensamiento y propaganda de manera que la división y el conflicto sean permanentes.
El conspiracionismo y el anarco-sindicalismo beben del marxismo, la división de la sociedad se concentra sólo entre ricos y pobres o burgueses y proletarios. No hay superación entre estas dos clases, ahora sí, no antagónicas y que sirven a una mismo fin, la consecución y perpetuación del poder político encarnado en el Estado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario