Yo lo que tengo cada vez más claro es que el poder no se puede (debe) dominar, solo abolir y que los que pretenden conquistarlo en nombre de un ideal, siempre mienten. El marxismo es una mierda, una mentira para evitar que la sociedad cambie, un lastre que impide que personas sensibles actúen de forma útil, es la forma de aglutinarlos y anular la capacidad de reacción contra el modelo de explotación que sufrimos.
El anarquismo de manual, igualmente es un lastre a evitar, menos teoría y más sentido común. Por otro lado, no se debe perseguir una sociedad igualitaria porque no somos iguales, ni se debe pretender que lo seamos. Unicamente se debe perseguir una sociedad sin explotación, sin dominadores.
Por supuesto ese es mi punto de vista, por eso me considero... no se ¿anarquista? -me da igual la etiqueta, pero que cada cual siga sus ideas, no las de un gurú, eso es lo que importa.
En este charla Octavio ha dicho una cosa muy importante para mi, cuando se ha referido al poder. Es cierto; que haya gobernados y gobernantes no significa que también haya entres éstos y aquellos dominados y dominadores, es decir, el poder va mucho más allá del Estado y sus instituciones, y por lo tanto se circunscribe también en el trabajo, en cualquier organización o en la familia, y en todo tipo de relaciones que se den, siempre está ahí. Lo que ocurre es que esto suele pasar hasta cierto punto desapercibido mientras el dominio no sea demasiado exagerado.
Entiendo por sociedad igualitaria, una sociedad en la cual todos los individuos tengan las mismas oportunidades para desarrollarse en todos los ámbitos de la vida.
Para mi no hay diferencia alguna entre un anarquista y un libertario, que es aquel que debería rechazar el poder en todos sus manifestaciones y formas.
Por ejemplo, cuando el autor (por muy brillantes que sean sus ideas) se convierte en autoridad surge un forma de poder y por lo tanto una forma de dominio a nivel espiritual o de pensamiento. Una sociedad libre estaría conformada por anónimos no por autores porque estos pretenden el poder.
Denominarse anarquista o libertario ya no tendría razón de ser en una sociedad libre, la etiqueta de anarquista (si se le quiere llamar asi haciendo referencia a cualquier movimiento como también podría ser el humanismo) hace referencia por lo tanto a una forma de entender la vida que se contrapone con la sociedad de la dominación o la socidad capitalista actual.
Yo lo que tengo cada vez más claro es que el poder no se puede (debe) dominar, solo abolir y que los que pretenden conquistarlo en nombre de un ideal, siempre mienten.
ResponderEliminarEl marxismo es una mierda, una mentira para evitar que la sociedad cambie, un lastre que impide que personas sensibles actúen de forma útil, es la forma de aglutinarlos y anular la capacidad de reacción contra el modelo de explotación que sufrimos.
El anarquismo de manual, igualmente es un lastre a evitar, menos teoría y más sentido común.
Por otro lado, no se debe perseguir una sociedad igualitaria porque no somos iguales, ni se debe pretender que lo seamos. Unicamente se debe perseguir una sociedad sin explotación, sin dominadores.
Por supuesto ese es mi punto de vista, por eso me considero... no se ¿anarquista? -me da igual la etiqueta, pero que cada cual siga sus ideas, no las de un gurú, eso es lo que importa.
Salud!
En este charla Octavio ha dicho una cosa muy importante para mi, cuando se ha referido al poder. Es cierto; que haya gobernados y gobernantes no significa que también haya entres éstos y aquellos dominados y dominadores, es decir, el poder va mucho más allá del Estado y sus instituciones, y por lo tanto se circunscribe también en el trabajo, en cualquier organización o en la familia, y en todo tipo de relaciones que se den, siempre está ahí. Lo que ocurre es que esto suele pasar hasta cierto punto desapercibido mientras el dominio no sea demasiado exagerado.
ResponderEliminarEntiendo por sociedad igualitaria, una sociedad en la cual todos los individuos tengan las mismas oportunidades para desarrollarse en todos los ámbitos de la vida.
Para mi no hay diferencia alguna entre un anarquista y un libertario, que es aquel que debería rechazar el poder en todos sus manifestaciones y formas.
Por ejemplo, cuando el autor (por muy brillantes que sean sus ideas) se convierte en autoridad surge un forma de poder y por lo tanto una forma de dominio a nivel espiritual o de pensamiento. Una sociedad libre estaría conformada por anónimos no por autores porque estos pretenden el poder.
ResponderEliminarDenominarse anarquista o libertario ya no tendría razón de ser en una sociedad libre, la etiqueta de anarquista (si se le quiere llamar asi haciendo referencia a cualquier movimiento como también podría ser el humanismo) hace referencia por lo tanto a una forma de entender la vida que se contrapone con la sociedad de la dominación o la socidad capitalista actual.
ResponderEliminar