domingo, 8 de noviembre de 2015

Una pequeña reflexión sobre la revolución.



Si alguna vez se produce una verdadera revolución, ésta tendrá que ser primero política y después social, es decir, el explotado y el dominado deberán saberse y sentirse clase dominada y explotada por una clase dominadora y explotadora que los oprime, engaña y finalmente los priva de la libertad, de este modo, la clase explotada y dominada podrá librarse de sus cadenas y a la vez hacer que la clase explotadora y dominadora recupere también la conciencia social perdida por la lucha de clases establecida en primera instancia por ésta.

8 comentarios:

  1. A esto me refería en el anterior comentario, para evitar esto se he transformado a la sociedad y ya nadie se siente esclavo, ahora son clase media y lucha por tener cadenas nuevas y brillantes, no por la libertad.


    Salud!

    ResponderEliminar
  2. Pensaba que era al revés, primer tomar conciencia y después la acción política. Primero desalienarse y después actuar. En cuanto que la burguesía tome conciencia... lo que querrán es sacar tajada de la nueva situación como hicieron con la revolución rusa o con el ascenso Nazi. A mi entender no hay futuro fuera de los movimientos sociales, todo es Business as usual.
    Salud!

    ResponderEliminar
  3. Sigo pensando que el posible despertar del ser humano surgirá antes en el explotado que en el explotador, en este sentido creo que es la ausencia de conciencia de clase por parte de los oprimidos la que reproduce el sistema de dominación y también como dices que no es percibida como tal porque la inmensa mayoría ya ama sus cadenas, el sistema técnico o tecnológico se ha encargado de perfeccionar el control psicológico de la gran masa, por cierto, creado por la clase explotadora para unos fines concretos de dominación mental.

    Ahora bien, hay que señalar también en este sentido que antes también se daba la manipulación psicológica y sobretodo empezó a partir de la revolución industrial o de la era técnica moderna, en este punto comenzó a fraguarse el adoctrinamiento y el amaestramiento del hombre moderno con la creación de los partidos políticos y los sindicatos afines, de este modo, por ejemplo, se obliga al hombre a emigrar de las zonas rurales a las industriales y aceptar el trabajo asalariado como forma de subsistencia.

    En este aspecto la CNT como sindicato independiente de cualquier partido político y anarcosindicalista fue el único que plantó cara al sistema capitalista con sus problemas y contradicciones y errores como el de creer que un gobierno republicano solucionaría los problemas de los trabajadores antes que una dictadura, de todos modos creo que es la única forma de hacer política desde la base sin entrar en las instituciones del Estado, es decir, sin ser absorbido por el Estado e intentando realizar proyectos emancipadores fuera del sistema capitalista.

    Salut!

    ResponderEliminar
  4. También puedes hacer política sin necesidad de sindicatos, por ejemplo, con un amigo.

    ResponderEliminar
  5. Pablo, se da por sentado que la conciencia de clase conlleva la conciencia social, es decir el hombre antes que todo en sociedad fue político, en la reflexión me he referido a la conciencia política para dividir a las clases sociales y de este modo definirlas como tal, digo esto, porque ahora mismo el hombre medio no tiene conciencia política ni social.

    La fotografía la publiqué aposta porque la "Revolución francesa" no fue ninguna revolución sino un engaño.

    Salut!

    ResponderEliminar
  6. Pierre Clastres / La sociedad contra el Estado

    "Cuando, en la sociedad primitiva, lo económico puede ser
    considerado como campo autónomo y definido, cuando la
    actividad de producción se convierte en trabajo alienado,
    contabilizado e impuesto por los que se aprovechan de los
    frutos de este trabajo, es que la sociedad ya no es primitiva,
    se ha convertido en una sociedad dividida en dominadores
    y dominados, en dueños y sujetos, es que ha dejado de
    exorcisar lo que está destinado a matarla: el poder y el
    respeto al poder. La mayor división de la sociedad, la que
    fundamenta todas las demás, incluida sin duda la división
    del trabajo, es la nueva disposición vertical entre la base y
    la cúspide, es la gran ruptura política entre detentadores de
    la fuerza, sea ésta guerrera o religiosa, y sometidos a esta
    fuerza. La relación política de poder precede y fundamenta
    la relación económica de explotación. Antes de que sea
    económica, la alienación es política, el poder es anterior al
    trabajo, lo económico es una derivación de lo político, el
    surgimiento del Estado determina la aparición de las
    clases".

    ResponderEliminar
  7. Creo que Pablo ha confundido tomar conciencia con formar un partido y unirse al juego.
    Y es que hay mucha gente con conciencia de clase, pero hay una gran mayoría que aun prefiere el partido del domingo.
    Y sobre concienciar a los ricos, esos ya están más que concienciados, (o desconcienciados en otro sentido) pero igual que saben de la lucha de clases, saben que ellos son el otro bando.

    Salut!

    ResponderEliminar
  8. Creo que los que ostentan el poder político y económico sólo son victimas de su propia codicia y la de erigirse como seres superiores con capacidad para gobernar a los demás, consecuencia de su auto-engaño al sentirse más libres e importantes (prestigio) que los demás pero que a la vez también afecta a la inmensa mayoría de la sociedad al formar parte del sistema capitalista jerarquizado, es decir, lo económico y político se interrelacionan siempre de forma constante, a más poder económico más poder político y viceversa.

    Ahora bien, puntualizo lo de que se sienten más libres que los demás porque ostentan más poder y riquezas al explotar y dominar a una gran mayoría que en el fondo -aunque sea de otras formas- persigue los mismos objetivos, la élite de poder como tal es dependiente del pueblo engañado y finalmente auto-engañado que la sustenta con su consentimiento.

    Habría que señalar que el poder deriva también de la necesidad de prestigio que tenemos los hombres -un condicionamiento adquirido, es decir cultural-, de alcanzar cierto prestigio en una sociedad jerarquizada y que significa por lo tanto tener que poseer más dinero y reconocimiento político y social entre otras cosas.

    En una sociedad igualitaria no habría esa necesidad de prestigio porque a todos se nos reconocería por nuestras cualidades y aptitudes, la mayoría diferentes entre los hombres y mujeres.

    Salut!

    ResponderEliminar