Renunciar al pasado, renunciar al futuro, desprenderse de los recuerdos es lo que conlleva la esencia del espíritu humano. Ser uno mismo significa sentir y vibrar con el presente, identificarse con el mundo y con el universo, olvidar lo que uno ha sido y será, es ser uno y el mundo.
Vivir con la certeza de la intuición de que somos mortales e inmortales en su totalidad, aniquilar el pensamiento conflictivo producto de la infelicidad, ¿Qué es la felicidad?, una ilusión pasajera de nuestra mente, un producto de nuestro pensamiento, del condicionamiento pasajero, un fantasía creada por nuestras sensaciones, sentimientos efímeros, ¿Qué es el hombre?, un producto del pensamiento inducido por las emociones, sentimientos, sensaciones. Pasajeros de un mundo que ha devenido un infierno más que un paraíso, somos lo que somos, una mota de polvo del universo debido a nuestro propio engaño, insignificantes debido a nuestra causa…
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